Tras el estallido de la crisis del COVID 19 se han puesto en evidencia las condiciones del agro en Andalucía y todo el estado español. Desde los invernaderos de Almería, pasando por las labores del olivar en muchas explotaciones de campiña y sierra, hasta los campos de fresas y frutos rojos de Huelva están viviendo unas situaciones de precariedad, falta de higiene y precauciones mínimas ante el coronavirus que son alarmantes.