Ayer, primero de Mayo, distintas organizaciones sindicales combativas (CGT, CNT, CO.BAS, SAT y USTEA-INtersindical Andaluza) debieron manifestarse en medio del boicot del Ayuntamiento de Córdoba y la incompetencia de la subdelegación del gobierno.

La Subdelegación del Gobierno tenía constancia de esta manifestación, con salida a las 12 horas, desde el 1 de abril, sin que en ningún momento comunicara a los convocantes incidencia alguna relacionada con su desarrollo.

La unica reunión mantenida, se celebró a iniciativa de los sindicatos convocantes, tras conocer, y no a través de la subdelegación, de la convocatoria por parte de CCOO y UGT de otra manifestación con idéntico punto de partida y el mismo inicio de recorrido, pero una hora antes.

En dicha reunión, que tenía como objetivo coordinar la salida de ambas manifestaciones, ya se preguntó al portavoz de la subdelegación sobre la posible coincidencia con la «batalla de las flores», como sucedió en 2012, sin que se nos indicara que hubiera ningún problema al respecto.

Sin embargo, los convocantes si fuimos informados de la coincidencia por la policía municipal, pero de forma totalmente casual, al gestionar los permisos para el acto final en la Corredera.

Comprobando que efectivamente en buena parte de la publicidad institucional del Ayuntamiento , esta «batalla» era anunciada  a las 12 horas, nos dirigimos de nuevo a la subdelegación, para aclarar el asunto, obteniendo de nuevo como respuesta que no existía problema alguno, ni informe en contra de Policia Municipal, que la «batalla" estaba convocada a las 12:30h. con margen suficiente y que en todo caso la «batalla de las flores» se retrasaría si era necesario.

Así, la subdelegación y el Ayuntamiento fueron  manifiestamente incompetentes para la coordinación de las distintas convocatorias, lo que demuestra que el celo que viene poniendo en la comunicación de todo tipo de actos reivindicativos, sancionando a quien no lo haga, no tiene más que una finalidad represiva, y no de coordinación y servicio público.

Por parte del Ayuntamiento, asistimos a una estrategia descarada para desvirtuar la jornada del primero de mayo, trasladando a esta fecha un acto que tradicionalmente se celebraba el último domingo de abril, y haciéndolo coincidir con la manifestación del sindicalismo más combativo, buscando la colisión de ambos actos y el conflicto entre los asistentes a uno y otro. Un intento fracasado por la importante asistencia a la manifestación, con más de 5.000 personas, y gracias el saber estar de los manifestantes frente a las provocaciones. Cualquier retraso no se debió sino a las dificultades para avanzar en algunos puntos debido a la coincidencia con el público que esperaba la batalla de las flores, y que ocupó la calzada.

En definitiva, dos instituciones, que ayer demostraron su incompetencia, mal hacer y desprecio por los derechos y la lucha de los trabajadores y trabajadoras, y que deberían asumir responsabilidades por lo sucedido.

Finalmente, en una provincia con cerca de 130.000 parados y paradas deberíamos reflexionar como sociedad, si el primero de mayo es momento de salir a la calle a luchar y exigir medidas contra esta situación, o el día para tirarse flores.

Confederación General del Trabajo (CGT)

Confederación Nacional del Trabajo (CNT)

Comisiones de Base (Co.Bas)

Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT)

Unión de Sindicatos de Trabajadores y Trabajadoras de Andalucía (USTEA) - Intersindical Andaluza