Le ha faltado tiempo al Subdelegado del Gobierno , Juan José Primo Jurado, para tratar de equiparar a “extremistas de izquierdas y de derechas”, apenas unos días después del grave apuñalamiento de una persona por parte de conocidos nazis cordobeses.
Intencionadamente, Primo Jurado, trata de derivar el tema hacia un problema de “radicalismo político y violencia”, de ambos signos, remarcando oportunamente esto último en todas sus declaraciones de los últimos días. Con ello trata de obviar, que nos encontramos ante una grave agresión, dónde hay agresores y una víctima.
No nos engañemos, ni dejemos que Primo Jurado lo haga. El problema que esta agresión ha puesto de manifiesto, es que grupos muy concretos, identificados con la extrema derecha, que llaman a la violencia y que viene proclamando el odio contra personas de izquierdas, inmigrantes y homosexuales entre otros grupos, a pesar de ser muy minoritarios, han estado a punto de acabar con la vida de una persona.
Ante esta grave situación, el subdelegado del gobierno se dedica a mirar para otro lado, equiparar a quienes son el objetivo de estas agresiones con quienes las promueven, tratando de criminalizar por el camino a los movimientos sociales y poco más que culpabilizar a quienes las sufren.
Debemos decir que no nos extrañan en absoluto estas declaraciones, viniendo de un cargo público que mostró públicamente su respeto y saludo por la fascista y nazi División Azul, cuya misión calificó de “fascinante y dura” en un artículo en la prensa local.
Son evidentes las simpatías políticas que ese artículo pone de manifiesto, y las declaraciones realizadas ahora, tras la agresión sufrida, parecen evidenciar que el Subdelegado del Gobierno está dejando que sus simpatías políticas le guíen en el ejercicio de sus funciones como cargo público.
Creemos que poco podemos esperar de Primo Jurado, en la lucha contra estos grupos fascistas, pero no por ello vamos a dejar de exigirle que cumpla con las obligaciones y las responsabilidades que le corresponden.
Lo importante de que ante el avance de las formaciones fascistas y xenófobas en Europa, la sociedad tome conciencia de la importancia de tejer redes de solidaridad con quienes sufren los ataques, de plantar cara a estos grupos, de tener una actitud de tolerancia cero con quienes los integran y con quienes los legitiman y apoyan.
No olvidemos en favor de quien trabajan estos grupos, a quien favorecen sus acciones, y que políticas han conducido a su auge en Europa. No olvidemos tampoco que estos grupos pintan en las calles de la ciudad “en Melilla más cuchillas”, otros , responsables del partido político de Primo Jurado, las instalan y llevan adelante las políticas que acaban con la Guardia Civil disparando pelotas de goma y denegando el auxilio a cientos de personas en el mar, 15 de las cuales acabaron ahogadas.
Precisamente contra esas políticas se está generando un movimiento creciente en nuestra ciudad, y no sólo en ella, un movimiento cada vez más masivo y participativo, que está saliendo a la calle con cada vez más fuerza.
Las declaraciones del subdelegado tampoco son ajenas al intento de criminalización y manipulación con la que este Gobierno indigno trata de responder en los últimos días a la masiva movilización de las Marchas de la Dignidad.
Por eso creemos que la solidaridad, el apoyo mutuo y la autogestión, la organización de los trabajadores y trabajadoras, desde abajo y para cambiar este sistema injusto, es el mejor antídoto contra el fascismo, y quienes lo amparan.
CNT Córdoba.