Cash Converters reconoce la falsedad de las acusaciones contra la compañera y alcanza un acuerdo para indemnizarla con una cantidad satisfactoria para la trabajadora, muy por encima de la establecida legalmente.

El pasado verano Cash Converters despidió disciplinariamente a nuestra compañera Victoria, trabajadora de la tienda de Cash Converters en Córdoba y que se encontraba de baja, utilizando falsas acusaciones.

Desde el primer momento, el sindicato hizo saber a Cash Converters que no iba a admitir este abuso por parte de la empresa, reclamando la readmisión de la compañera.

Ante la denuncia pública de CNT, y las primeras movilizaciones, la empresa ofreció indemnizar a la compañera por un despido improcedente, reconociendo de esa forma que las acusaciones utilizadas para justificar el despido disciplinario eran falsas.

La compañera, con el apoyo del sindicato, rechazó la indemnización, entendiendo que tras las falsas acusaciones, no bastaba con ofrecer la miserable indemnización que las sucesivas reformas laborales otorgan en estos casos a los trabajadores, eso haría que a la empresa le saliese muy barato mentir y despedir a una trabajadora por estar de baja.

Se puso así en marcha una sucesión de concentraciones a las puertas de la tienda de Cash Converters en Córdoba y en otras ciudades, mediante la solidaridad de distintos sindicatos de CNT, denunciando la política laboral de Cash Converters.

La denuncia también se trasladó a las redes sociales donde se ha denunciado el despido de la compañera por estar de baja, las falsas acusaciones que la empresa usa como forma de despidos, y se señaló a los accionistas y directivos de esta multinacional, responsables últimos de este tipo de prácticas laborales.

Finalmente , tras seis meses de campaña de denuncia, se llegó a la fecha del juicio. Ante la imposibilidad de obtener por vía jurídica una sentencia de nulidad que forzase la readmisión, y habiendo encontrado la compañera un nuevo empleo, esta optó por alcanzar un acuerdo económico que supera en más del doble la indemnización legal incluyendo un escrito de recomendación de la empresa, que viniera a reconocer públicamente la falsedad de las acusaciones que motivaron el despido disciplinario.

Desde CNT, a pesar de no haber sido posible forzar la readmisión de la compañera por la vía de la acción directa, que era el objetivo principal, se valora positivamente la campaña de denuncia desarrollada, que ha servido para señalar las prácticas laborales de esta cadena, habiendo forzado a la empresa a rectificar el abuso prepotente que suponía un despido disciplinario con falsas acusaciones como forma de deshacerse gratis de una trabajadora de baja, teniendo que reconocer la falsedad de estas acusaciones, la ilegalidad del despido e indemnizando por más del doble de la indemnización legal a la trabajadora, a modo de compensación por el abuso padecido, evidenciando que organizarse sindicalmente sirve y que es fundamental rechazar y movilizarse contra este tipo de abusos laborales.